ABANICO/ La nostalgia vende
Por Ivette Estrada Las grandes irrupciones marcan importantes parteaguas de vida y revaloración de personas y momentos. Tras el COVID-19 se establecieron nuevas pautas de conducta en las que se priorizó la familia mientras se escrudiña, ahora, en que pasamos el tiempo. Emerge, casi imperceptiblemente, la nostalgia. Esto moldea hábitos y la manera de trabajar, vivir, divertirse y amar. Pero también cómo se distribuye el presupuesto. En éste, aumentan las inversiones para volver asequibles la tranquilidad y seguridad, pero también por acercarnos a los recuerdos. El marketing de la nostalgia aparece entonces. Generar añoranza e idealizar el pasado permite que las marcas establezcan un lazo emocional con sus consumidores. Y no nos referimos a la generación silenciosa o los baby boomer. El cohorte de los Millenialls, quienes nacieron entre 1981 y 1996 es el que mayormente subyuga la nostalgia. “Es […]

