¿Terminará la pandemia este 2023?
En las últimas semanas, a pesar de que en varios países se han reportado nuevos brotes y picos de contagio con las diferentes variantes de COVID-19, como ‘Xibalbá’ y ‘Perro del infierno’, algunos especialistas alrededor del mundo prevén un panorama prometedor acerca de la pandemia. Señalan que este 2023 podría ser el año en el que deje de ser una emergencia internacional, o bien, en el que se convierta en una enfermedad endémica.
Una de estas afirmaciones fue dada por un equipo de analistas de la Universidad de Lanzhou de China, quienes señalan que su sistema de predicción combina campos como las ciencias atmosféricas y la epidemiología para hacer sus predicciones. También, el virólogo alemán Christian Drosten, en entrevista con el diario Tagesspiegel, aseguró que “al término del invierno y el comienzo de la primavera de este año, la inmunidad de la población será amplia y resistente, por lo que el virus no podrá causar otra ola de contagios global.”
Sin embargo, otros expertos como el Dr. Benjamín Pizarro, médico jefe de Examedi, señalan que: “es extremadamente difícil poder predecir cuándo finalizará la pandemia, por lo que no se debe bajar la guardia” y que si se quiere continuar por un camino que lleve a recuperar la normalidad, “la vacunación sigue siendo la mejor estrategia, puesto que, además de disminuir la tasa de infecciones, también ha disminuido las complicaciones, hospitalizaciones y muertes derivadas de ésta.”
Es por eso que, aún cuando parezca que los efectos de la pandemia se están diluyendo, no dejemos de tener los cuidados habituales, como el lavado constante de manos, el uso de cubrebocas o aislarse cuando se presente alguno de los síntomas de la enfermedad. Pero también “las medidas de autocuidado deben ser aplicadas según la realidad de cada país y según el momento epidemiológico que vivan”, señaló el Dr. Pizarro de Examedi.
También es importante recordar que, junto a las complicaciones de salud físicas, se han observado un aumento de las patologías psiquiátricas que, en parte, se han presentado por el estrés y el cambio de los hábitos que la pandemia nos obligó a tomar. Es por eso que medidas, como el aislamiento, por ejemplo, se deben tomar siempre considerando tanto los beneficios, como los posibles efectos negativos.