Hoy más que nunca, la tecnología se ha convertido en una aliada en diferentes aspectos de nuestra vida, en especial en lo referente a la salud. En la última década, han nacido y crecido de forma exponencial diversas herramientas digitales que contribuyen al diagnóstico y tratamiento de enfermedades, además de ayudarnos a procurar nuestro bienestar.
La atención remota y la implementación de uso de inteligencia artificial son solo algunos de los instrumentos de los que se valen los profesionales de la salud, para mejorar la atención a sus pacientes, profundizar en las investigaciones y proporcionar tratamientos cada vez más efectivos.
Las herramientas digitales para el cuidado de la salud están cada vez más cerca de los usuarios.
Tal es el caso de los relojes inteligentes, los cuales han evolucionado en gran medida, pasando de solo tener las funciones básicas como contador de pasos y monitor de frecuencia cardiaca, hasta monitorear el índice de masa corporal , los niveles de grasa, de minerales e hidratación en el organismo, además de verificar la calidad del sueño y procesar los datos para informar al usuario su estado corporal y el tiempo de descanso que requiere para recuperarse.
De igual forma las básculas inteligentes miden el IMC, la tasa metabólica, la masa muscular y ósea, y basta con sincronizar tu teléfono a un pastillero inteligente para recordar la hora exacta en que debes un medicamento.
Por otro lado, destaca que los pacientes no son los únicos interesados en utilizar la tecnología para el cuidado de su salud, una encuesta realizada por la Consumer Technology Association reveló que 50% de ellos afirmó que usaría un dispositivo de salud conectado como parte de su tratamiento, mientras que 68% de los médicos entrevistados confirmó su intención de utilizar tecnología remota de monitoreo de pacientes.
La salud a distancia está cada vez más cerca y de hecho ya es una realidad. En el campo de la mHealth o salud móvil hay una innumerable variedad de aplicaciones y plataformas.
