VU introduce una nueva era de soluciones de ciberseguridad en México
La ciberseguridad siempre ha sido un tema urgente; sin embargo, la pandemia y la acelerada digitalización han provocado un recrudecimiento de los ataques. En un mundo inmerso en una nueva realidad que se ha vuelto vital, la identidad digital que viene con ella también debe protegerse. La tecnología hace las cosas más cómodas, pero los rápidos avances vienen acompañados de nuevos defectos y desafíos.
La protección del ciberespacio contra la usurpación de identidad, el robo de datos o incluso de recursos informáticos es una cuestión urgente. Cuando las organizaciones de todo el mundo se apresuraron a adaptarse a Covid-19, se encontraron rápidamente ahogadas en un pozo negro de riesgos de ciberseguridad. Los delincuentes informáticos, aprovechando esta nueva vulnerabilidad, no pierden el tiempo en aumentar sus esfuerzos de ataque.
Según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, la venta de los datos personas suele ser muy lucrativa: en el mercado negro el costo promedio de tu número de seguridad social es de 52 pesos y los datos de las tarjetas bancarias es de 60 pesos. Al año, las pérdidas por robo de identidad en México (en cualquier modalidad) suman un total de 5,000 millones de pesos.
Las organizaciones no estaban preparadas
La mayoría de los retos de ciberseguridad a los que se enfrentan las empresas en estos momentos se derivan de la rápida evolución del panorama de la seguridad. Hay tantas variables que muchas organizaciones están luchando solo para salir adelante. Un gran porcentaje no tenía un protocolo de ciberseguridad eficaz, para empezar. De las que sí lo tenían, la mayoría aún no preveía ni estaba preparada para dar soporte a un personal totalmente remoto. En este tipo de entorno laboral, la seguridad de los puntos finales debe proteger todos los dispositivos, incluidos los móviles.
Gabriel Bravo, Director Comercial de VU en México, explica que “el aumento del número de empleados que trabajan a distancia significa que muchas personas utilizan sus dispositivos personales para realizar sus actividades mientras se conectan a sus redes domésticas o, en los casos de acceso doméstico limitado, a las redes públicas” y agrega que, “lo anterior, hace que las herramientas tradicionales de seguridad sean impotentes, ya que no son capaces de gestionar la visibilidad o el control, de los accesos remotos. El riesgo de exponer la información confidencial a robos o daños es mucho mayor.” La Asociación Mexicana de Internet reporta que, el 68% de los usuarios, no usa un segundo factor de autenticación y que casi la mitad de ellos (31%) desconoce lo que es un segundo factor de autenticación.
Biometría, una solución para los retos actuales
Ante los retos de ciberseguridad, por fortuna existen soluciones con tecnología biométrica que buscan romper con el paradigma de la ciberseguridad tradicional y llevar a las empresas mexicanas a una nueva era digital más segura. VU es una compañía global que se especializa en la prevención del fraude y la protección de la identidad y su misión es proporcionar experiencias digitales seguras y sin fricciones, tanto para los ciudadanos como para las empresas, durante su proceso de transformación digital.
Cuando la mayoría de la gente oye hablar de la biometría, lo primero que le viene a la mente es el escaneo de un dedo, pero las tecnologías biométricas son más que eso y en realidad utilizan una serie de características físicas, siendo algunas más seguras que otras.
La tecnología biométrica agiliza el proceso de identificación del usuario y permite a las empresas mejorar la eficiencia de sus operaciones. El reconocimiento facial ya no es solo una aplicación para lugares de alto riesgo, como aeropuertos y edificios gubernamentales, ya que ahora, en un contexto totalmente digitalizado, una solución como la de la VU sirve como una forma proactiva de ayudar a las empresas, en todos los sectores, a proteger sus activos.
“Un elemento importante en la lucha contra la delincuencia financiera y el blanqueo de dinero es la comprobación KYC (Know Your Customer) o conocimiento del cliente, que es el proceso obligatorio de identificación y verificación de la identidad del cliente.” Comenta Gabriel Bravo de VU. Con la biometría, los minoristas, los bancos, las organizaciones FinTech, los operadores de telecomunicaciones e incluso el comercio electrónico pueden realizar las comprobaciones KYC obligatorias de los clientes de forma más rápida y eficiente utilizando la biometría.
Actualmente, México se encuentra en torno a una gran discusión sobre la recopilación de los datos biométricos, ya que efectivamente estos representan la identidad digital de cada individuo, pero también es la identidad de empresas y marcas. México ocupa el octavo lugar a nivel mundial y es tercer lugar de América Latina por robo de identidad, según el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales.
Por ello, VU introduce en México su innovadora solución basada en biometría para interacciones seguras y sin fricciones. Cuenta con capacidades de reconocimiento facial y de voz de última generación que ayudarán a las empresas a integrar la identidad humana en su software a fin de proteger las transacciones y mejorar la experiencia de usuario de todos los clientes.
El crecimiento de la industria sugiere que el sector está en pleno apogeo, y solo se esperan más avances. A medida que las instituciones financieras, los gobiernos y el sector comercial se digitalizan, aprovechar los beneficios y las funciones que ofrece la biometría, será la única solución viable para la protección de datos en el futuro.