INFRAESTRUCTURA/ Inversiones en desarrollo como círculos virtuosos
Por Allan Cruz Hernández, experto en infraestructura y políticas públicas
El dinero público para el desarrollo de infraestructura como carreteras, vías de comunicación, puertos y aeropuertos, será el más alto desde hace doce años. Pese a esto, aun se considera insuficiente para la atracción de capital.
Este dinero se destinará principalmente a la construcción del Tren Maya y el desarrollo del istmo de Tehuantepec. Proyectos hidráulicos como Agua Saludable para la Laguna, la presa Santa María, la ampliación del distrito de riego del pueblo yaqui, la presa Zapotillo y el acueducto El Cuchillo 2.
También se tiene previsto a proyectos carreteros y de conectividad, como la construcción del tren México-Toluca, la conexión de la zona oriente del Valle de México, las autopistas Mitla-Tehuantepec, Barranca Larga-Ventanilla, Real del Monte-Huasca y Portezuelo-Ciudad Valles, así como la construcción de caminos rurales y obras en Guerrero, Oaxaca y Sonora, entre otros.
La partida presupuestal también contempla la rehabilitación de refinerías y los proyectos de exploración y producción del hidrocarburo, así como de conectividad, a través de instalación de torres y antenas para la cobertura de red celular para CFE Telecomunicaciones e Internet para Todos.
El gobierno federal determinó la prioridad de 22 programas y obras de infraestructura para el año 2024. Entre las obras prioritarias se encuentran el Tren Maya, la conclusión del Tren Interurbano México-Toluca, la ampliación del Tren Suburbano de Lechería al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), así como la construcción del espacio cultural en Los Pinos y el Bosque de Chapultepec.
Por su parte, laa Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) buscará tener para 2024 un presupuesto similar de 78 mil 499 millones de pesos, lo programado para 2023. Se espera que la inversión pública muestre un buen comportamiento ante la culminación de proyectos de infraestructura impulsados por el Gobierno Federal.
Estos proyectos incluyen obras de transportes y conectividad, desarrollo regional, generación y transmisión de electricidad, parques solares e industriales, proyectos de refinación y explotación de yacimientos petrolíferos.
En materia de infraestructura económica, el gasto de inversión contempla recursos por 1 billón 108.4 mil millones de pesos, de los cuales 80.2% se destinará a la inversión física.
Sin embargo, a pesar de la importancia que tiene la infraestructura pública en la capacidad para atraer y retener talento e inversión, el monto asignado a la inversión pública en 2024 (1.11 billones de pesos) es 11.1% menor en términos reales al monto aprobado en 2023, cuyo presupuesto fue de 1.19 billones de pesos.
Este recorte presupuestal puede resultar en una menor atracción de empresas que potencialmente busquen trasladar sus operaciones a México desde el extranjero.
Debemos comenzar a mirar la inversión pública como detonador y círculo virtuoso para la inversión privada.