Diego Urik fue finalmente declarado culpable del feminicidio de Jessica González Villaseñor, un crimen ocurrido hace más de dos años en Morelia, Michoacán.
Este viernes 27 de enero, un juez se basó en 120 pruebas para determinar la responsabilidad del joven en el hecho ocurrido el 21 de septiembre de 2020, cuando Jessica tenía 21 años.
“Las acciones que ejecutó fueron evidentemente con desprecio a la mujer, vulnerando con ello su derecho a la integridad física, psíquica ya su dignidad como persona”, informó la fiscalía estatal.
Asimismo, detalló que en los siguientes días se dará a conocer la pena individualizada para Diego.
Jessica González fue reportada con desaparecida el 21 de septiembre y, el 25 de septiembre de 2020, su cuerpo fue hallado en una finca ubicada en Morelia, Michoacán. Días después, la fiscalía estatal obtuvo una orden de aprehensión contra Diego Urik, por ser el principal sospechoso.
La fiscalía de Michoacán había ofrecido un millón de pesos a quien diera información que llevara a la captura del joven, quien en ese entonces tenía 18 años.
Cinco días después, el 30 de septiembre de 2020, el feminicida fue detenido en Jalisco y trasladado a Michoacán para ponerlo a disposición de un juez de control, como resultado de un trabajo de colaboración entre las fiscalías estatales.
Asimismo, la fiscalía de Michoacán reconoció que durante las investigaciones se contó con el apoyo de los familiares de la víctima.
González Villaseñor, se dedicaba a la docencia. Meses antes del feminicdio, se graduó de la carrera magisterial en el Colegio Salesiano Anahuac, de la ciudad de Morelia y comenzó a ejercer su profesión.
El Instituto Nacional de Migración (INM) informó que trabajaba en colaboración con la FGEM y con la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) para evitar la posible salida del entonces presunto responsable del país.