EL ROCK NO PIDE PERMISO: CUCA REGRESA A LA MARAKA CON RIESGO DE CONTAGIO

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*El concierto se llevará a cabo el Viernes 28 de Noviembre de 2025 a las 8pm en el Centro de Espectáculos La Maraka

*Los boletos para este evento están disponibles en Boletia

Hay noches que no se anuncian, se presienten. Noches que se gestan en la entraña de la historia y en la sed insaciable del público por reencontrarse con aquello que les hizo vibrar desde la primera distorsión. La ciudad de México se prepara para una de esas citas sagradas: el próximo viernes 28 de noviembre de 2025, Cuca, una de las bandas más legendarias y crudas del rock mexicano, regresa al escenario de La Maraka para ofrecer un espectáculo que será cicatriz y celebración, a la vez. A su lado, compartiendo esta comunión eléctrica, estará otra agrupación de culto: Riesgo de Contagio, firmando con ello una velada que quedará impresa en la memoria sonora de todo un país. Los boletos están ya disponibles a través de Boletia, y cada uno encierra una promesa de redención colectiva.

Cuca no se presenta: se invoca. Se convoca como a los dioses antiguos, con respeto y con ansias. Desde su irrupción en 1989, con la voz grave e incendiaria de José Fors al frente, esta banda nacida en Guadalajara supo trastocar los límites de la corrección, dinamitar el conservadurismo desde la sátira y convertir la furia en poesía rasposa. Su rock nunca ha sido complaciente: es rudo, carnal, provocador. Es espejo incómodo de un país que no siempre quiere verse reflejado, pero que no puede apartar la mirada. Cuca canta al deseo, a la frustración, a la rabia social y a la carne sin metáforas. Y lo hace con una honestidad brutal que ha forjado, a lo largo de más de tres décadas, una de las trayectorias más imponentes del rock en español.

El 28 de noviembre será una noche marcada por la espera que se alarga y el deseo que se agudiza. Tras un aplazamiento inevitable por motivos de salud, el regreso de Cuca se vuelve aún más simbólico: no es solo una reprogramación, es una reafirmación. La banda vuelve no a saldar una deuda, sino a encender una hoguera en la que todos estamos invitados a arder. Las paredes de La Maraka vibrarán con canciones que ya no pertenecen a un tiempo ni a un álbum, sino al ADN emocional de generaciones enteras: temas como “La Balada”, “Tu Flor”, “El Son del Dolor” o “Señorita Cara de Pizza” se alzarán como gritos de guerra, himnos de una irreverencia lúcida que nunca ha pedido permiso para sonar.

A este aquelarre se suma Riesgo de Contagio, banda icónica surgida en los años noventa y que dejó una huella imborrable en la escena alternativa del país. Dueños de una propuesta que cruzó con desparpajo el ska, el punk, el reggae y el rock más ecléctico, fueron siempre una bomba de creatividad y energía, una bocanada de aire sucio y necesario en un panorama dominado por lo convencional. Con letras agudas, fiestas sonoras sin censura y una puesta en escena explosiva, Riesgo de Contagio se convirtió en emblema de la rebeldía y la experimentación, abriendo puertas que aún hoy otras bandas transitan con respeto. Que estén de regreso junto a Cuca no es casualidad: es una conjunción de potencias que comparten la osadía, la trayectoria y ese don de conectar con la entraña de su audiencia.

La Maraka se transformará esa noche en más que un foro: será santuario del desahogo, del éxtasis y la resistencia. La cercanía del público, la arquitectura vibrante del recinto y el espíritu ardiente de dos bandas míticas convertirán ese viernes en una experiencia que trasciende lo musical. Será un pacto entre artistas y público, entre guitarras y gargantas, entre memoria y presente.

Porque el rock mexicano, cuando se manifiesta en su estado más puro, no busca agradar: busca despertar. Busca morder, provocar, incendiar. Y eso es precisamente lo que harán Cuca y Riesgo de Contagio: prenderle fuego al alma de los que saben que la música no es fondo, sino forma de vida.

Este 28 de noviembre, el rugido será colectivo. El escenario, sagrado. Y el grito, eterno.